Agricultores de la cuenca del Aconcagua advierten que la sequía les provoca un daño terminal

Agricultores de la cuenca del Aconcagua advierten que la sequía les provoca un daño terminal

Productores de Quillota y Marga Marga aseguran que son los más afectados y que en cuatro años han perdido entre 600 y 800 millones de dólares.

"La sequía nos ha puesto en una situación dramática y está provocando un daño terminal", revelan los agricultores de las provincias de Quillota y Marga Marga, en el valle del río Aconcagua.

Ante ese panorama, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) restableció por tres meses como zonas de escasez hídrica a las provincias de San Felipe, Los Andes, Quillota y Marga Marga, lo que incluye intervenir el río para que los regantes de las cuatro secciones en las que se ha dividido la cuenca (de 190 km de longitud, desde la alta cordillera donde nace, hasta la desembocadura) puedan tener una porción de agua garantizada a la semana.

"Lo agradecemos, pero no entendemos por qué el decreto nos garantiza agua solo 24 horas a la semana y no 36 como teníamos antes y que tampoco eran suficientes", señala Walter Riegel, presidente de la Junta de Vigilancia de la tercera sección.

El agricultor señala que los más afectados por la sequía son los productores agrícolas de las provincias de Quillota y Marga Marga (tercera y cuarta secciones), porque "los que están aguas arriba reciben la mayor cantidad de la poca agua que trae el río Aconcagua". Con ello, señala que los cultivos de hortaliza han disminuido en un 60% y los de frutales un 40% en promedio.

Santiago Matta, también regante de Quillota, señala que el caudal del río Aconcagua ha caído en más de la mitad respecto de los promedios hídricos de los últimos 70 años, y que en los cuatro años de sequía que ya enfrenta el país en la zona centro las pérdidas están entre los 600 y 800 millones de dólares, solo en las provincias de Quillota y Marga Marga.

Edgardo Alarcón, de Limache, cuenta que de 60 hectáreas que destinaba al cultivo, en su fundo del sector Santa Rosa, debió dejar que se secara la mitad y ralear los frutos de sus cítricos para que al menos algunos logren calibre de exportación. "El canal Lliu Lliu que nos ayudaba a regar está seco, y ya no podemos hacer pozos, porque perforamos hasta 18 metros y logramos sacar menos de un litro por segundo y eso ya no conviene", explica.

Hacer un pozo significa pagar 200 mil pesos por cada metro de profundidad y los costos de bombeo son altos. "Tengo 10 pozos que me entregan una cantidad insignificante de agua y pago hasta un millón 800 mil pesos de luz al mes", dice Edgardo Alarcón.

Pocas esperanzas

Los dirigentes de los regantes de la tercera y cuarta secciones se reunieron ayer con el intendente de la V Región, Ricardo Bravo, para plantearle su situación. En un encuentro que duró unos 20 minutos a orillas del canal Calle Larga, en La Calera, la autoridad les informó que serán habilitados 41 pozos para aumentar el caudal del río Aconcagua, y que se crearán mesas de trabajo para buscar soluciones.

Pero los agricultores aseguran que se necesita más que eso para paliar la crisis y que las soluciones pasan por construir obras mayores, ya que en toda la V Región, en donde hay suelos de elevada productividad agrícola, no hay embalses.

El de Chacrillas, que está en etapa final de construcción, será el primero.

"En nuestra sección tenemos unas 26 mil hectáreas y si consideramos que hay que despedir al menos un trabajador por hectárea, el impacto en el empleo es alto. Ahora no se ha notado por el crecimiento de la minería, pero eso puede variar con el precio del cobre", señala Walter Riegel.

El gobernador de Quillota, César Barra, explicó que se buscará la forma para que los propios regantes lleguen a un acuerdo que permita la distribución equitativa de las aguas del río Aconcagua, y que si eso no se logra, la autoridad tiene facultades para intervenir el río.

Héctor Salazar, presidente de los canalistas de Hijuelas, señala que en su sector el agua es tan escasa que cada regante la recibe cada 35 días "y así ningún productor puede resistir".

Salazar es aún más gráfico: "En un par de semanas el caudal de nuestro canal ha disminuido en casi un 90%".

El 65% de la producción agrícola de las provincias de Quillota y Marga Marga corresponde a frutales, y un 35% a hortalizas, principalmente tomates.

Dentro de los frutales, el 70% son paltas, siendo esta zona la principal productora del rubro a nivel nacional.

12,3 m3 de agua por segundo fue el caudal del Aconcagua en marzo.

 

Fuente: El Mercurio

Deje una respuesta

* Nombre:
* E-mail: (No Publicado)
   Website: (Url con http://)
* Comentario:
Escriba código